Los unicornios son criaturas mitológicas que universalmente se representan como un caballo blanco con un cuerno en la frente.
La leyenda cuenta que este animal era invencible y que su cuerno tenía poderes sanadores. El mito fue escrito por el médico griego Ctesias; este historiador del siglo V a. C. relató sus expediciones a la India, en las que describía un animal silvestre con apariencia de caballo, cuerpo blanco, cabeza púrpura, ojos azules y un cuerno en la frente de color negro y punta roja. Este era capaz de sanar problemas estomacales, epilepsia, así como de prevenir la muerte por envenenamiento.
Más tarde, se supo que correspondía al colmillo de un narval o que pertenecía con total probabilidad al rinoceronte de la India, un animal de cuatro toneladas que cuenta con un cuerno sobre su hocico.
Todas sus leyendas lo describen como un animal solitario, esquivo y agresivo, lo que lo hacía muy difícil de capturar. Durante la Edad Media, los nobles enviaban a la India hombres para su cacería. Estos estaban convencidos de que su cuerno poseía poderes mágicos. Si lo consumían, prevendrían enfermedades y su vida sería más larga.
Famosas imágenes de unicornios
Artísticamente, los unicornios han sido representados en innumerables ocasiones, pero las más destacadas han sido las siguientes:
La dama del unicornio (Museo de Cluny)
La caza del unicornio (Museo Metropolitano de Arte)
Últimos hallazgos: ¿tan solo una leyenda?
Recientemente, se pudo ver en la reserva natural de Prato, en la Toscana, un pequeño corzo con un cuerno en la frente. Automáticamente, las analogías con las leyendas de unicornios se hicieron presentes y los comentarios sobre la posibilidad de que no hubiesen sido tales.
Gilberto Tozzi, director de la reserva natural de Prato, se refirió al respecto: «Es la demostración de que el mítico unicornio de las leyendas seguramente no era un objeto de fantasía, sino un animal de verdad con una anomalía morfológica como la de nuestro corzo».